El derecho de las patatas
Ficción / 16 min./ 35 mm. / 2001. PREMIOS: Mejor corto ficción festival de Mahadahonda, Mejor montaje del festival de Fuentes de Ebro (Zaragoza), Premio Telson en el Festival Internacional de cine experimental de Madrid.
En tono de comedia surrealista El derecho de las patatas es un falso documental, mezclado con falso noticiario televisivo, sobre la vida y desaparición de una cortometrajista, María Martín y su veneración por las patatas (o por el modo en que la gente lo dice delante de una cámara).
El derecho de las patatas mezcla diferentes registros fílmicos, desde la animación de objetos y personas, hasta las tomas de vídeo doméstico, pasando por emulaciones televisivas del musical para generar una historia particular potenciada al conectar cada secuencia con una réplica absurda que disuelve su lógica como documento. Estas memorias, pasiones y desdichas personales de la vida de la autora en el cine son condensadas en torno a su alter ego María Martín y la réplica de ésta a los diez años. La ficticia realizadora experimental, influenciada por Maya Deren, usa la cámara para ver la realidad a distancia y opina que la película sirve para meternos en la vida de los otros.
A raíz del reestreno del mítico film de Iván Zulueta Arrebato, comienzan a desaparecer cortometrajistas de super8, los medios han dado en llamar al suceso «el efecto 2000 del Cinexín». María Martín ha sido la última en desaparecer. Luis Gómez, el reportero que cubre la noticia se obsesiona por el caso investigando entre sus filmaciones en blanco y negro, entrevistando a conocidos de la realizadora, observando las patatas, etc. para su documental Memoria y muerte de una cortometrajista. El lema de María Martín: «Me gusta dejar la cámara en libertad y que tome lo que quiera» es la excusa que toma la cámara para devorar a su protagonista en Arrebato, una ficción que se hace real.
Falso documental que apoya su ambigüedad al presentar a dos personas mediáticamente reconocibles como Mayra Gómez Kemp y Santiago Segura, a parte de estar plagado de testimonios paradójicos, mujeres diciendo patata, dibujos animados de patatas y créditos con hombres diciendo patata. Lo documental pasa a ficción fantástica con tintes oníricos cuando María Martín se enamora de Oscuro, causa probable de su desaparición. Su testamento pasa por la desaparición total en el anonimato ya que expresa el deseo de que a su muerte todos sus vídeos sean borrados y se de libertad y repartan las patatas entre todos los hambrientos.
Es curioso observar cómo en la filmografía de Mercedes Gaspar la comida es uno de sus temas relevantes: los dos amantes que se comen entre ellos en Las partes de mi que te aman o la Eva que devora a su hombre en El sueño de Adán, el banquete de comida representada en El sabor de la comida de lata o las patatas en este trabajo. La alimentación es presentada por Mercedes Gaspar como un acto de comunicación íntima. En este corto las patatas (en ocasiones engullidas) no son objeto exclusivo de alimento sino que se convierten en fetiche y representación de los deseos ocultos.
Ficha técnica
Título: El derecho de las patatas
Dirección: Mercedes Gaspar
Producción: Mercedes Gaspar. 2001.
Equipo:
Guión: Mercedes Gaspar
Fotografía: César Hernando
Música: Alejandro Díez
Montaje: Jorge Mora
Actores: Zoe Berriatúa
Duración: 00:17:00
Lenguajes: Español
Formatos: Betacam Digital – DVD
Sistemas de TV: NTSC – PAL
Licencia: Copyright